
Buenos días, Señor, gracias por este día,
aunque Tú sabes lo mucho que me cuestan los lunes,
y más a primera hora...
Por favor, te pido que me ayudes, que nos ayudes,
a no desperdiciar este día, que es otro regalo inmenso.
Me concedes 24 horas gratis, que quiero aprovechar bien.
Me encantaría hacer muchas cosas, pero soy limitado;
ayúdame a dedicarme a lo realmente importante.
Me gustaría que los demás se llevasen bien conmigo;
pero indícame con quién puedo llevarme mejor.
No quiero que nadie me estropee el día;
ayúdame a aceptar los imprevistos que no puedo cambiar.
Si me entran ganas de hablar mal de alguien,
que piense antes si me gustaría que me criticaran.
Quisera, a la noche, estar satisfecho con este día;
fortaléceme para vencer mi pereza.
Me gustaría que este mundo no fuese tan caótico;
ven, Dios mío, y ayúdame a embellecerlo un poco,
lo poquito que pueda, con tu ayuda.
Amén.
Padre Nuestro...
Comentarios
Publicar un comentario